Netflix estrenó recientemente Anatomía de un escándalo, una miniserie británica de seis episodios creada por David E. Kelley (Big Little Lies) y Melissa James Gibson en base a la novela de Sarah Vaughan publicada en 2018.
Apenas 6 episodios le bastaron a Anatomía de un escándalo para convertirse en una de las series del momento en Netflix. Thriller y drama judicial, Anatomía de un escándalo sorprende con una historia en la que el poder, la impunidad y la injusticia ocupan un lugar privilegiado.
Basada en la novela más vendida de la periodista británica Sarah Vaughan, Anatomía de un escándalo combina titulares de prensa con algunos giros verdaderamente extraños. La miniserie cuenta la historia de “un político acusado de un crimen escandaloso, una esposa que quiere creerle y una abogada segura de que miente”.
Algunos de los comentarios de la crítica especializada: Empire: “Incisivo, enfurecido y con un excelente reparto, este oportuno drama puede estar hecho para un visionado compulsivo, pero ofrece mucho material para reflexionar“. Algo similar destacan en Ready Steady Cut, donde afirman que “es un misterio judicial fascinante que se ve reforzado por el talento de su reparto”.
Igualmente, algunos medios consideraron que, a pesar de no ser una gran historia, por momentos es muy entretenida y tiene un punto fuerte en su elenco.
“La forma en la que los episodios se conectan […] hacen que Anatomy of a Scandal tenga la misma lógica de un best-seller: uno sabe que lo que está viendo no es gran cosa, pero las páginas vuelan y los seis episodios se consumen muy rápidamente” comentan en MicropsiaCine.
