Press "Enter" to skip to content

Toda va mejor con Cristiano-Cola

Corresponsal en Barcelona

Fue así: Cristiano Ronaldo quitó dos botellas de coca cola de la mesa de una rueda de prensa pública y la empresa sufrió en cuestión de minutos unas pérdidas equivalentes a cuatro mil millones de dólares. Increíble, neo-real, neoliberal y hasta banal. El asunto asusta, pero da ideas.

Aunque haya sospechas fundadas que la marca de agua sea también un producto de la misma empresa y todo haya sido un spot publicitario, aun siendo así no deja de sorprender el poder y el efecto de los medios de desinformación.

La bolsa, el Ibex (índice bursátil de la bolsa española), las finanzas del mundo entero parecieran depender de un simple gesto del ídolo de turno: esconder una botella de coca cola y tomar agua podría cambiar el rumbo del planeta.

No es que Cristiano Ronaldo sea un personaje simpático precisamente, más bien hace gala de un narcisismo exacerbado y prepotente, pero no se puede negar que fue el protagonista de una de las noticias más impactantes de la semana.

El apretado nudo compuesto por neoliberalismo, marketing, influencers, medios de des-información y mercado de valores se tambalea por un gesto de uno de los nuevos gladiadores del circo mundial.

Da igual el carácter verdadero o engañoso sobre las pérdidas millonarias que ocasionó el gesto, el asunto aterra tanto si es verdad como si no, porque no se trata de la verdad bursátil, se trata del poder de manipulación y del poder acumulado en los medios. Esa es la verdad que queda una vez más descubierta.

Aunque me divierte pensar en la verdad bursátil: supongamos que es verdad que ese gesto ocasionó grandes pérdidas: ¿Qué pasaría si estos personajes, metonimias de los gladiadores del circo romano, usaran su fama para fines nobles? Aunque ya el de la coca cola me lo parece, pero podríamos pensar en otros fines con efectos beneficiosos a escala global.

¿Sí Messi en una rueda de prensa rompiera su Visa, o mirara con desconfianza un cartel de la Caixa o de Endesa (Empresa Nacional de Electricidad Sociedad Anónima), qué efecto tendría? ¿Bajaría el precio de la luz? ¿Los bancos dejarían de ejercer su tiranía mundial? ¿Volveríamos a la época liberal cuando aún los estados tenían cierta influencia sobre las empresas? ¿Dejaríamos atrás la dictadura financiera?

¿O si Lewis Hamilton, corredor exitoso de Fórmula 1, apartara una hamburguesa de vaca y se comiera una hamburguesa de soja?

¿Todos nos haríamos veganos y bajaría drásticamente el recalentamiento del planeta causado por los eructos de las vacas?

La verdad es que no creo que cambie nada, pero seguro que más de un adicto al Ibex y sus derivados se llevaría un buen disgusto.

Buen fin de semana

- -