Crónica de viaje "Traslasierra al Sol" (parte I)

Por Miguel Culaciati

Con esta nota iniciamos una serie de crónicas sobre el Valle de San Javier, popularmente conocido como Valle de Traslasierra, Córdoba. Tierras soleadas, de clima casi perfecto, que no tuvieron ese gran desarrollo, esa “ belle epoque “ que, por ejemplo, vivió el Valle de Punilla a principios del Siglo XX. Esto debido a su relativo aislamiento ( recién en la década del 70 se consolidó la ruta que une a Villa Cura Brochero en Traslasierra con Carlos Paz ) lo que provocó un crecimiento demográfico económico mucho más lento. Hoy en día sin embargo luce una personalidad definida con una cantidad de novedades, desarrollos y posibilidades que lo hacen más que atrayente desde el punta de vista turístico. Entre las localidades más conocidas no se pueden dejar de mencionar: Nono, Villa de las Rosas, San Javier y Yacanto, Los Hornillos, Mina Clavero, Villa Cura Brochero, Las Rabonas todas al pie de las sierras grandes presididas por el imponente Champaquí con sus 2900 msnm. El centro comercial y jurisdiccional es la ciudad de Villa Dolores fundada en 1853.

Hotel Yacanto Golf

Estilo, belleza e historia. Al pie mismo del cerro Champaquí, uno de los hoteles más bellos de Córdoba: el Yacanto Golf. Con la llegada del ferrocarril a la cercana ciudad de Villa Dolores a principios del Siglo XX, las autoridades inglesas del FFCC Pacífico, compraron un antiguo molino harinero ubicado en Yacanto para tener un lugar de descanso y sociabilidad. Al poco tiempo de su fundación el gerente y un reconocido médico, Elíseo Segura, deciden llevar adelante la cancha de golf de 9 hoyos, maravilloso diseño de Carlos Blasi. Hoy subsiste como una joya para quien sepa descubrirlo, ya centenario, delatando bellamente esa huella inglesa en la zona.Impecablemente mantenido ofrece a quienes aprecien la belleza y elegancia de su arquitectura, el silencio, uno de los mejores microclimas del mundo a 900 metros de altura, una forestación que sólo el paso de muchas décadas puede regalar, vertientes cruzando el parque y la cancha de golf . También cuenta con cancha de tenis, piscinas, masajes, programas de trekking, cabalgatas, ascenso al cercano Champaquí ,el pintoresco pueblito a sólo un kilómetro, las bodegas boutique que van surgiendo en la zona, alternativas gastronómicas de excelente nivel.

Y la atención personalizada de Julio Madero, unido al hotel por su historia familiar y golfística, que con su equipo están atentos a cada necesidad de los viajeros.Hoy en día con caminos de excelencia, como el precioso cruce e las Altas Cumbres posibilitan una
llegada por ejemplo desde Carlos Paz o Villa General Belgrano ágil y disfrutable. Si ese cóctel de silencio, paz, montaña y vertientes, más golf y la huella inglesa en una construcción centenaria bella y mantenida te seducen, sin dudas éste es el hotel indicado.

www.hotelyacanto.com – 3544302463 – Instagram hotelyacanto

“Museo ROCSEN: diferente e imperdible”

Cómo enlazar la historia de un niño que curioseando, escarbando, en el anfiteatro de Cimiez, Niza, al sur de Francia alrededor de 1936 desentierra un soldadito romano de barro cocido de 2000 años de antigüedad con un Museo polifacético que alberga más de 60.000 objetos ordenados en 116 temáticas diferentes ubicado en las afueras de una pequeña localidad de 2400 habitantes en el Valle de Traslasierra, en la Provincia de Córdoba, Argentina?La respuesta se encuentra en el itinerario de la intensa y fascinante vida de Juan Santiago Bouchón a quien tuve la fortuna de conocer personalmente en los años 90 s, cuando recorría la zona y el país en una vieja camioneta rastreando, comprando o recibiendo donaciones de objetos de la más variada clase. Nacido en Niza, dentro de una familia de artistas y decoradores en 1928, ya desde muy pequeño demostró interés y curiosidad por absolutamente todo, acumulando en cajones y bolsillos insectos, objetos y piedras que le llamaban la atención. Transcurre sus primeros años con cierta normalidad hasta el advenimiento de la Segunda Guerra Mundial que trajo consigo tremendas pruebas y horrores, que le tocan vivir a un Juan Santiago aún adolescente. Finalizada la contienda marcha a París donde estudia antropología, Bellas Artes y Artes Aplicadas a la Industria.

En 1950 sus padres, que también habían sufrido en carne propia la guerra, deciden emigrar hacia Argentina donde había surgido una propuesta de trabajo en la Embajada de Francia. A los nueve años de establecido en Argentina Santiago encuentra “ su lugar en el mundo” en la pequeña y soleada localidad de Nono y según el mismo escribe, “el 6 de Enero de 1969 me levanté a las 5 de la mañana y fui hasta la ruta a colocar el cartel que indicaba : Museo Rocsen (“roca sagrada” en celta), abierto los 365 días del año, desde las 9 de la mañana hasta la puesta del sol”. El deseo de él era lograr un museo polifacético con la finalidad de interesar al público más diverso. Y vaya si lo logró. Hoy el edificio cuenta con 2700 metros cuadrados y más de 60.000 elementos de todas partes del mundo agrupados en 116 espacios temáticos donde se puede apreciar desde una momia inca hasta colecciones de insectos, minerales, vestimenta, etc. Su impresionante fachada con las 49 estatuas realizadas por el propio Bouchon transmite su filosofía y mensaje humanista.

Los 60.000 objetos nos cuentan desde la historia de la fotografía, la del cine, la de las peluquerías o la de los consultorios odontológicos. Así resulta prácticamente imposible que el visitante no encuentre aquí un área de interés, que no se vea conmovido emocionalmente por algún objeto. Decía Don Santiago: “Yo me definiría simplemente como alguien que quiere pensar y, sobre todo, intentar hacer pensar. Descubrí que lo más importante en el aprender es el enseñar. Porque cultivarse para nutrir un ego sería un absurdo total. Si el conocimiento no fuera público, si este museo no estuviera abierto a las escuelas, no tendría ningún sentido. Nunca nadie se ha llevado nada bajo tierra. El museo lo estamos haciendo nosotros, pero el museo es de la humanidad. Todo el hombre, para todos los hombres” . Juan Santiago Bouchon falleció el 1ro de Febrero de 2019 a los 90 años, habiendo cumplido el 6 de enero 50 años del museo sin haber cerrado ni un sólo día. En 2017 se creó la Fundación Museo Rocsen, la misma se encarga del museo y tiene por objetivo contribuir a la educación cultural y científica de la comunidad.

www.museorocsen.org – 3544 498218 Instagram: museorocsen

BODEGA ARAOZ DE LAMADRID – Escuchar el latido de la Tierra

Quizá como resultado de haber hecho por tanto tiempo crónicas de viaje por diferentes países y culturas, creo haber aprendido a distinguir claramente cuando arribo a un lugar que tiene el singular brillo que sólo puede otorgar el hecho de estar creado con amor, con pasión y delicado esmero.

Y eso en Bodega Aráoz de Lamadrid pude percibirlo a los pocos minutos de caminar junto a Ana por ese paradisíaco espacio serrano pleno de arte y detalles que le brinda marco a este hotel-bodega.Es evidente que Ana y Goyo han encontrado su lugar en el mundo, han sido permeables al llamado, al latido de esa tierra, lo han escuchado y han respondido con amor, con creatividad y con semillas. Y al sol invicto de Traslasierra esa siembra floreció en el color de los jardines y viñedos, en el aroma y el canto de sus vinos. Por eso no es una visita más a un sitio turístico cualquiera. Es una experiencia, un intercambio nutriente y mágico si es que el visitante se ha mantenido sensible, si comprende que al colocarse en actitud de escucha recibirá mucho más que una simple visita a una bodega y una hostería.

A medida que se recorren esas once hectáreas con sus estanques, esculturas, cactarios y viñedos, podrá disfrutar la caricia que devuelve la madre naturaleza y a la vez podrá verse entibiado por esa dicha apacible que sin duda empapa y rebalsa a sus moradores.Para quienes llegamos del cemento, de tanto estrépito y laberinto urbano, es reconfortante notar que en sitios como éste continúa sonando (para quien quiera escucharla ) la perfecta melodía. En los senderos que serpentean entre flores y espinillos se percibe un delicado acorde, como el eco de la armonía esencial y primaria. Cuidados jardines y estanques que se acoplan con armonía al paisaje serrano, a partir del buen gusto, el diseño y el arte. Todo al amparo del noble y gigante Champaquí que preside y enmarca cada escena. Esta es la propuesta de una familia que eligió San
Javier para vivir y para compartir con los visitantes su itinerario y su aprendizaje.

Hospedaje de alto standart en bellísimas habitaciones totalmente equipadas, visita guiada, degustación de vinos y un menú de 5 pasos exquisito. Parque y monte nativo. Canteros de herbáceas, cuarteles de vid junto a 30 estanques con nenúfares y lotos. Esculturas al aire libre de artistas locales (se brinda una guía para reconocerlas y disfrutarlas ) y una gigantesca colección de cactus. De día aves y mariposas; en las noches un cielo que invita a navegar y soñar entre las estrellas. Así lo dicen claramente: “Compartimos nuestro tesoro, con personas sensibles, a la naturaleza al arte y el buen vino». Comparten su experiencia vital,esa conexión, ese idilio con el soleado Valle de Traslasierra. Nunca la sabiduría dice una cosa y la naturaleza otra. La madre tierra tiene mucho para decirnos a través del color y del sabor de sus vinos, mucho para regalarnos mientras andamos los senderos y transcurren las charlas en Bodega Araoz de Lamadrid.