La mayoría de las personas que mantienen encuentros sexuales, sostienen que no hay satisfacción sexual plena, si no se alcanza el ansiado orgasmo.
Es como la frutilla del postre… pero siempre que disfrutas de una excelente comida ¿necesitas postre?
Se considera al clímax como el objetivo único y en realidad la relción sexual comienza en el cerebro, en las imagines que vamos fantaseando, creando y obviamente en el deseo… sin este no hay encuentro posible.
Otras creen que el acto sexual está basado únicamente en lo genital.
Pero en realidad la satisfacción va mas allá de la genitalidad y el orgasmo.
Una relación sexual satisfactoria debe iniciarse en descubrir el cuerpo y la piel de la pareja, observar las sensaciones, y donde está ubicado el placer de cada uno de los integrantes del encuentro sexoafectivo
El problema sucede cuando nos centramos obsesivamente en el orgasmo, como el burro con la zanahoria.
Vamos a describir el orgasmo este consiste en la descarga o liberación de la tensión sexual y forma parte DE UNA de las fases de la respuesta sexual.
¿Qué es una respuesta sexual? En ambos sexos, involucra un aumento del ritmo cardíaco.
En el caso de los hombres, el pene se llena de sangre y aumenta considerablemente su tamaño, conformando lo que llamamos una erección. En el caso de las mujeres, se dilata la vulva y se humedece la vagina, a causa de ese aumento de irrigación de sangre en sus paredes.
Masters y Johnson, dividieron la respuesta sexual en cuatro fases: fase de la excitación (que se manifiesta en la mujer con la lubricación vaginal y en el hombre comúnmente con la erección), la meseta, el orgasmo y la resolución.
Desde el punto de vista fisiológico el orgasmo, “es una fase de la respuesta sexual que ocurre después de una fase de excitación positiva”. Entonces, es en la excitación correcta, en donde los intervinientes encuentren o no, el placer maximo. Pero sobre todo, como dije antes la excitación debe estar en concordancia con las expectativas, deseos, salud o motivación de cada momento, de cada encuentro, ya que ningún coito con la misma persona es idéntico al anterior.
En los tiempos actuales se está magnificando tanto el orgasmo que hemos caído en el orgasmocentrismo, es decir, en la idea de que la sexualidad satisfactoria solo existe para alcanzar ese fin. Se trata de un reduccionismo de la sexualidad aún vigente y cada vez mas instalada.
Esta idea falsa solo ayuda a proporcionar y predisponer a las personas a la frustración casi anticipadamente, debido a que solo se procura llegar al orgasmo o clímax y si este no aparece el hombre siente que no ha dado placer y las mujeres dan como respuesta la insatisfacción a ese encuentro.
El clímax es esa sensación de “pérdida del control”, con un aumento considerable de las pulsaciones y la presión sanguínea, la respiración se vuelve más agitada, estas suelen ser solo algunas de las señales que se perciben. Además, se producen contracciones rítmicas en la zona perineal y el rostro puede cambiar la pigmentación.
En lo personal me gusta definirlo como un estado único, nunca antes sentido, es como desaparecer del propio cuerpo por unos instantes. Irse del mundo terrenal para luego volver y re encontrarse con la pareja sexual.
Algunos tips para tener en cuenta
- Respetar al otro cuando dice NO a algún tipo de propuesta sexual que no desea realizar.
- Comunicar siempre los sentimientos que genera la conducta sexual propia o de mi pareja
- Pedir lo que queremos. Explicar asertivamente la forma en que nos gusta recibir el placer.
- Desmitificar el orgasmo, y potenciar el placer de los sentidos y de todo nuestro cuerpo, no solo de la zona genital. El sexo está en nuestro cerebro. En toda nuestra inmensidad humana
- Complicidad e intimidad.
- Mucha creatividad, pudiendo utilizar ropa interior, bailes, ciertos lugares no comunes para evitar el aburrimiento, etc.
El sexo satisfactorio es principalmente comunicación positiva de nuestra sexualidad
