Esta receta tradicional de Argentina y Uruguay es en mi opinión uno de los más ricos para acompañar unos mates de domingo o presentar en una mesa dulce en los eventos. Será que por estos lados, el membrillo o la batata no se consiguen fácilmente que este postre se me antoja delicioso.
Generalmente se prepara con harina blanca y azúcar y dulces. Para obtener una versión más saludable sin resignar sabor, en esta receta propongo reemplazar una proporción de algunos ingredientes, para que sea más nutritiva y saludable.
Ingredientes para la masa:
100 gr. harina común (leudante)
50 gr. harina integral
50 gr. avena arrollada
50 gr. mix semillas molidas (girasol, calabaza, lino)
50 gr. de manteca
1 cdita. polvo hornear
1 cdita. esencia de vainilla
2 huevos
Ingredientes para el relleno
150 gr. membrillo o batata
1/2 taza agua
Opcional: media taza semillas de chia
Instrucciones:
Precalentar el horno a 180°C.
En un bowl, mezclar las harinas, avena, semillas y el polvo de hornear.
Agregar la manteca (que tiene que estar a temperatura ambiente), los huevos y la esencia de vainilla. Mezcla hasta obtener una masa uniforme.
Envolver la masa en papel film y refrigérala durante aproximadamente 30 minutos.
Dividir la masa en dos partes, una más grande que la otra.
Estirar la parte más grande de la masa con un rodillo y colocar en un molde para tarta previamente engrasado.
En una olla calentar el agua y el membrillo o batata hasta que quede con la consistencia de una mermelada. Opcionalmente agregar las semillas de chía previamente hidratadas (aproximadamente media hora en una taza con agua)
Con la parte más pequeña de la masa, crea tiras y colócalas en forma de enrejado sobre la mermelada.
Hornear la pasta frola durante 25-30 minutos o hasta que esté dorada.
Nutri-Info
La harina integral conserva la cáscara del grano de trigo, lo que la hace más rica en fibra y nutrientes en comparación con la harina blanca refinada. Esto significa que esta recetaproporciona más fibra, lo cual es beneficioso para la salud digestiva.
Además no utilizamos azúcar en la masa, el dulce que aporta el membrillo es suficiente para darle un sabor exquisito sin necesidad de usar azúcar extra.
Esta alternativa hará que este postre tenga un índice glucémico más bajo. Esta medida que se utiliza para evaluar la rapidez con la que los alimentos que contienen carbohidratos aumentan los niveles de azúcar en sangre. Un IG bajo significa que un alimento provoca un aumento gradual y moderado en los niveles de glucosa en sangre lo cuál es siempre aconsejable.
La opción de las semillas de chía yo la utilizo siempre ya que es una muy buena forma de aportar:
Fibra: Las semillas de chía son ricas en fibra, lo que puede mejorar el contenido de fibra en la mermelada. La fibra es beneficiosa para la salud digestiva y puede ayudar a prevenir problemas como el estreñimiento.
Textura: Las semillas de chía tienen la capacidad de absorber líquidos y formar un gel, lo que les da a las mermeladas y dulces una textura espesa y gelatinosa sin la necesidad de grandes cantidades de azúca. Esto es especialmente útil para reducir el contenido de azúcar.
Ácidos grasos omega-3: Las semillas de chía son una excelente fuente de ácidos grasos omega-3, que son beneficiosos para la salud cardiovascular y cerebral.
Aporte de proteínas: Las semillas de chía también contienen proteínas, lo que puede ser beneficioso para aquellos que buscan aumentar la ingesta de proteínas en su dieta.
Nutrientes adicionales: Las semillas de chía son ricas en nutrientes como calcio, magnesio y antioxidantes.
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Receta en Informe: Alicia Galieni, diplomada en Medicina Culinaria @saludablecuriosidad
Productos: de Verduleria y fruteria @CosaDeLocos
Prueba, fotografías y edición de la receta: Soledad Centurión
