En el común social siempre se asocia a la mujer el paso de los años, como si solo fuera una condición del sexo femenino.
Por eso es muy importante empezar a educar y concientizar sobre la andropausia debido a que conlleva múltiples síntomas en el varón, para así poder tratarlo y prevenirlo.
La andropausia es conocida también como el Síndrome de Deficiencia de Testosterona, que es la disminución de los niveles de testosterona en hombres pudiendo ser temprana a edades desde los 40 y clásica que va desde los 50 años en adelante. La testosterona es la hormona que se produce en los testículos y las glándulas suprarrenales y cumple funciones similares a las que cumplen los estrógenos en la mujer.
Los cambios que acompañan este fenómeno ocurren gradualmente y se traducen en cambios de actitud y estado de ánimo, fatiga, pérdida de energía, además del impulso sexual y la agilidad física, deterioro óseo, sensación de calor en el rostro, problemas circulatorios, sudoración, insomnio, dolor de cabeza recurrente, cansancio, irritabilidad, menor deseo sexual, nivel menor de eyaculación , depresión , malestar anímico, perdida de la memoria, aumento de peso y/o acumulación de grasa alrededor de la cintura que conlleva mayor riesgo de sufrir problemas de cardiacos.
Uno de los puntos a tener en cuenta desde la perspectiva emocional es que generalmente el hombre en este estadio de su vida, se deprime, se pone ansioso, gruñón, pasa en segundos de la felicidad a la angustia pero no entiende qué le pasa. Algunos van al gimnasio, empiezan a participar en grupos de running, biker; etc.
Existen en muchos hombres, mecanismos muchas veces negacionistas, para tratar de recuperar lo que se perdió, otros prueban con una amante mucho más joven pero como suele haber disfunción sexual, se frustran y se sienten peor. Piensan ‘siempre me ocupé de todos y ahora ¿quién se ocupa de mí? Y a diferencia de las mujeres, ni se les ocurre hablar con sus amigos de lo que les pasa, debido a que siempre se habla de menopausia, siendo la mujer la que está en el ojo de la tormenta por el paso de los años. En términos coloquiales la andropausia tiene poca prensa.
La mayor incidencia ocurre debido a que generalmente al hombre le cuesta ir a una simple consulta médica, entonces les puede resultar hasta vergonzoso ir al especialista sea urólogo, sexólogo o al psicólogo. Esto se debe que aun hoy en día, padecemos de muchos micromachismos.
¿Qué hacer cuando la andropausia afecta el deseo sexual y la erección?
Primeramente recurrir a un profesional como ya dijimos, realizarse después de los 40 años los controles prostáticos y de antígenos, si hay antecedentes de cáncer de mama o próstata, o comenzar anualmente sobre los 45 años, si no has tenido esos antecedentes familiares.
La disminución de testosterona podría afectar a la totalidad de la respuesta sexual, excitación y erección, principalmente, así como al funcionamiento inadecuado de las gónadas o testículos.
La alteración en la sexualidad tan sólo es una parte del trastorno. Sin embargo, hace que el hombre sienta que va perdiendo su masculinidad, su potencia sexual y parte de su atractivo, lo que puede conducir a un deterioro en su autoconfianza y autoestima.
Si no se dispone de información sobre el proceso en el que está inmerso, lo vivirá con un profundo sentimiento de pérdida y de fracaso pudiendo llevarlo a episodios de depresión.
Afectando claramente su capacidad de disfrute de las actividades cotidianas. No obstante, aunque hay un cierto descenso del ‘rendimiento sexual’ en los aspectos físicos, persiste la satisfacción psicológica y emocional.
El cambio más radical que debemos hacer como sociedad es la toma conciencia de que la sexualidad no es solo genitalidad, la sexualidad comprende el cuerpo en su totalidad, poniendo en marcha la sensualidad, el erotismo y la piel.
